Comercio electrónico en Panamá

¿Qué es el Comercio por Internet?

El Comercio por Internet, también conocido como comercio electrónico (e-commerce), es toda transacción de bienes o servicios que se realiza a través de plataformas digitales, utilizando Internet como medio principal de interacción.

Ya sea que vendas productos físicos, brindes servicios digitales o administres suscripciones, si lo haces en línea, estás ejerciendo comercio electrónico.

 

¿Por qué es importante entenderlo?

  • Porque aunque no se requiere autorización previa para operar un e-commerce, sí existen obligaciones legales que los prestadores de servicios deben conocer y cumplir.
  • En Panamá, el comercio electrónico está regulado principalmente por la Ley 51 de 2008 y normas complementarias sobre protección al consumidor y tributación.

 

Obligaciones legales básicas para un e-commerce en Panamá:

  1. Aviso de Operación en el portal PanamaEmprende.
  2. Registro municipal y cumplimiento de obligaciones fiscales.
  3. Términos y condiciones de uso en tu página web.
  4. Política de privacidad sobre manejo de datos personales.
  5. Identificación clara del proveedor (nombre legal, contacto, RUC).
  6. Cumplimiento de normativas de ACODECO sobre publicidad, promociones y devoluciones.
  7. Factura electrónica si emites comprobantes de venta digital.

 

Tipos comunes de comercio electrónico:

  1. Business to Consumer: Tiendas online, marketplaces.
  2. Business to Business: Plataformas entre empresas.
  3. Consumer to Consumer: Ej. ventas por redes o plataformas tipo Marketplace.
  4. Servicios digitales: Asesorías, cursos online, suscripciones.

 

Errores comunes que debes evitar:

  • No tener contratos digitales ni mecanismos de resolución de disputas.
  • No informar políticas de devolución o tiempos de entrega.
  • No declarar ingresos generados por ventas online.
  • Usar plataformas de pago sin revisar los términos de retención o comisión.

 

Consejos prácticos para emprendedores digitales:

  • Registra tu marca comercial.
  • Asegúrate de tener un contrato de términos y condiciones con validez legal.
  • Utiliza plataformas seguras y ofrece atención al cliente accesible.
  • Publica tus políticas de entrega, devolución y protección de datos.